El ejecutivo sudafricano viajó a Chile para visitar Pascua Lama, paralizado desde 2013 por problemas medioambientales
El nuevo CEO de Barrick Gold se ha comprometido a reducir el número de trabajadores en su oficina central en Toronto y revertir los planes para contratar analistas y codificadores de big data, mientras busca entregar el control de las operaciones alos sitios mineros locales.
Mark Bristow, un sudafricano de habla sencilla que se convirtió en el máximo responsable del mayor productor de oro del mundo después de la adquisición el año pasado de Randgold Resources, la minera de oro que él fundó en 1995, quiere que Barrick sea uan organzación más ágil con una estructura menos vertical.
Sus comentarios son las primeras señales de que Bristow establecerá la dura cultura de Randgold, lo que ayudó a que se convirtiera en una de las acciones con mejor desempeño en Londres antes de dejar de cotizar después de la adquisición.
Hablaba mientras el miércoles empezaban a operar las acciones de la compañía fusionada en Nueva York, que subieron 3% a u$s 13,54, lo que elevó su capitalización bursátil a u$s 16.000 millones.
Desde que se anunció la adquisición en septiembre, Barrick ha eliminado un piso completo de su oficina central en Toronto, contó Bristow. El objetivo es reducir el número de empleados a 70, comparado con los alrededor de 150 que había en septiembre.
En un giro en la estrategia de Barrick, Bristow dijo que eliminará los equipos internos de codificación y tecnología de la compañía, que se crearonn en EE.UU. en los últimos años como parte de un esfuerzo por aprovechar las últimas tecnologías digitales para bajar costos en las minas. Michelle Ash, quien era directora de innovación en Barrick, dejó la compañía a fines del
año pasado.
‘Lo que queremos hacer es asegurarnos de que implementamos eso en el lugar‘, dijo Bristow. ‘No queremos que la cola mueva al perro, queremos que la tecnología sea una parte integral de las operaciones diarias. El gerente de la mina debería obtener los datos primero‘.
Bristow, que es geólogo, dijo que Barrick no tendrá miedo de operar en países riesgosos o trabajar en proyectos difíciles. Quiere aumentar su exposición a la República Democrática del Congo, dijo, y desarrollar proyectos de cobre y oro en América del Sur.
Bristow y John Thornton, presidente ejecutivo de Barrick, han dicho que se centrarán principalmente en cinco minas de ‘clase mundial‘, incluidas Cortez y Goldstrike en Nevada, Kibali en la República Democrática del Congo, Loulo-Gounkoto en Mali y Pueblo Viejo en República Dominicana. Otras operaciones ‘no centrales‘ se vendieron, contaron.
Barrick ya informó que buscarán comprador para su participación de 50% en la mina Kalgoorlie en Australia, aunque Bristow dijo que el proceso no ha comenzado.
Los analistas también han especulado con que la mina de cobre Lumwana de la compañía en Zambia también podría incluirse en el bloque.
Bristow viajó recientemente a Chile, donde el gigantesco proyecto de Pascua Lama de Barrick en la frontera con Argentina está cerrado desde 2013 debido a dificultades ambientales. ‘Definitivamente estamos allá para quedarnos‘, dijo Bristow. ‘Mi mensaje para Argentina y Chile es que Barrick está de regreso‘.
Fuente: El Cronista