Si bien esta cifra es menor que los 33 procesos de este tipo que enfrentaron las grandes mineras en 2018, se espera que el año que viene, con un mayor conocimiento de la Reforma Laboral, las reivindicaciones de los sindicatos se hagan más presentes.
El acuerdo celebrado en agosto entre los trabajadores de Minera Escondida -perteneciente a BHP- y la administración de la compañía, en el marco de la firma de un nuevo contrato colectivo, fue uno de los hitos que marcó a la minería durante este año, pero no el único.
Además de ese proceso, que culminó con el pago de beneficios por $19 millones a alrededor de 2.500 trabajadores, el sector enfrentó a lo menos otras 32 negociaciones de este tipo.
Y de acuerdo con datos de Plusmining y de las propias compañías mineras 2019 no será un año exento de estas conversaciones. De hecho, el calendario de negociaciones ya registra a lo menos 17 procesos colectivos reglados (ver tabla), siendo Codelco la empresa que más se sentará a conversar con sus trabajadores y supervisores en el año.
“Durante 2018 el gran número de negociaciones encendió las alarmas de que podía haber una situación difícil, a lo que se sumó la Reforma Laboral que había entrado en 2017. Tengo la sensación de que se dio una situación sobre la que se prefirió evitar el conflicto”, señaló el director ejecutivo de Plusmining, Juan Carlos Guajardo.
En ese sentido, añadió que a pesar de que no se registraron numerosas huelgas, “a 2019 hay que observarlo porque ya va a haber un aprendizaje después de esta intensa ronda de negociaciones en torno a la nueva ley, y entonces van a empezar a haber negociaciones un poco más abiertas, con reivindicaciones más encima de la mesa y sin tantos temores”.
Un ejecutivo del sector indicó que al proyectarse un precio estable del valor del cobre, en torno a US$2,9 la libra, el precio del metal no debiese incidir ni positiva, ni negativamente en la tendencia respecto al nivel de beneficios con que se cerraron las negociaciones en 2018, por lo que no se visualizan cambios en los lineamientos que se establecieron algunas mineras.
Otro de los puntos que destacó Guajardo y que, a su juicio, incidirán en las próximas negociaciones, es la tendencia al alza de los costos laborales, versus la disminución de la productividad.
“Esa es una situación muy difícil de conciliar que va a tener que resolverse de alguna manera. Son tendencias que van en direcciones contrarias y que no pueden conciliarse de esa forma. Mi deseo es que a partir de estas negociaciones de 2019, pudiera haber mayor conciencia de las dos partes para poder manejar esto y canalizarlo hacia algo sostenible, sino el factor laboral se puede convertir en un problema muy serio para la minería chilena y puede llegar a ser un factor que haga difícil el negocio en Chile”, sostuvo.
Añadió que en el balance de los procesos que se vivieron en 2018, se vio favorecido por la política de reducción de costos que se iniciaron años atrás y por un mejor precio del cobre.
“Lo que pasó es que como las compañías ya habían hecho una política de contención de costos importante y el precio estaba subiendo, el margen fue bueno para las mineras en 2018 y al tener buenos márgenes las negociaciones mineras laborales se hicieron más factibles, pero fue una situación puntual”, complementó.
Factor Chuquicamata
Así, uno de los procesos de negociación colectiva que se desarrollará el próximo año y que más expectación genera, es el que se dará desde abril en Codelco con seis sindicatos de la División Chuquicamata, operación que en 2019 además, pasará a ser subterránea, lo que implica el recambio de parte de los trabajadores y también de la formulación de planes de egreso.
“Chuquicamata es la negociación más importante, pero porque coincide con la transformación de la división a minería subterránea, y al haber esa coincidencia va a estar muy influida por ese factor”, destacó Guajardo.
De hecho, en las últimas jornadas, algunos trabajadores han desarrollado una serie de movilizaciones -sin impacto productivo- “por la intransigencia de la administración”, frente a la cual han acusado, entre otras cosas, que ésta “se ha negado sistemáticamente a revisar el plan de salud post egreso” y que ha impuesto “un modelo de egreso especial diseñado unilateralmente”.
Brazo minero de CAP cierra negociaciones
CAP Minería informó ayer que -de manera anticipada- alcanzó tres nuevos convenios colectivos con los sindicatos de trabajadores de Cerro Negro Norte, Planta Magnetita y Puerto Punta Totoralillo, operaciones ubicadas en la Región de Atacama.
Dicho convenio consideró un bono por término de negociación de $4 millones y un premio de anticipo de negociación de $2,5 millones, más un préstamo blando por otros $1,5 millones.
Fuente: Pulso