Fuente: Mercurio Calama/Eugenio Sugg Gálvez
Iniciativas presentadas al SEA entre enero y septiembre suman US$16.023 millones, un 47,7% más que en el mismo periodo de 2016.
Una fuerte alza de 47,7% experimentó el monto de los proyectos ingresados a tramitación ambiental en la Región de Antofagasta durante los primeros tres trimestres de este año. De acuerdo a la información dispuesta en la página del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), durante los primeros nueve meses de 2017 se presentaron 40 iniciativas por US$16.123 millones.
Efectivamente, el alza experimentada este año por la cotización internacional del cobre -que ha obligado a corregir al alza todas las estimaciones- se está comenzando a reflejar en el número y monto de los proyectos que buscan licencia ambiental en la zona.
Así, durante los primeros tres cuartos de 2016 ingresaron 27 iniciativas por US$16.037 millones, monto casi idéntico al registrado durante el mismo periodo de este año.
Sin embargo, hay un elemento distorsionador presente en ambos periodos y está dado por el ingreso en tres ocasiones del mega proyecto de generación Fotoelectricidad El Loa, el cual durante agosto de este año fue finalmente reemplazado por Termosolar Bundang-Gu Calama (US$4.000 millones).
Despejando esa iniciativa, el monto para el mismo periodo de 2016 cae a US$5.037 millones y para este año a US$9.623 millones, lo que arroja ese aumento de 47,7%. Sectores
Como viene siendo recurrente durante los últimos años en la región, son los sectores Energía y Minería los que concentran mayoritariamente la inversión.
Respecto del primero, durante el periodo en análisis el monto de los proyectos sectoriales ingresados alcanza los US$4.230 millones. Destacan -además de Bundang-Gu-, la Línea de alta tensión Los Changos – Kimal (US$160 millones) y el parque fotovoltaico Verano de San Juan (US$22,5 millones).
En el sector minero, en tanto, ingresaron 15 iniciativas por US$4.257 millones, entre las que destaca la Adecuación Operacional del Depósito de Relaves y Optimización del Proyecto Sierra Gorda (US$2.000 millones) y Adecuaciones Constructivas y Operacionales del Proyecto Mina Chuquicamata Subterránea (US$1.400 millones).
Respecto de este escenario, el gerente de Estudios de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Álvaro Merino, se mostró optimista, aunque con algunos reparos.
“Considerando la información de Cochilco, que estima una carpeta de proyectos de inversión minera para los próximos diez años por un monto de US$65.000 millones en el país. Por cierto que el potencial existe, adicionalmente, un mayor precio del cobre de largo plazo incentiva y promueve la exploración”, aseguró Merino. Legislación
Sin embargo, el ejecutivo advirtió que esa situación no es suficiente para dar un impulso robusto a la inversión minera.
“Por ello hemos planteado que debemos promover cambios en nuestra legislación que otorguen mayores grados de certeza jurídica, asimismo es necesario agilizar el otorgamiento de permisos y generar una instancia pública que vele por una más expedita tramitación de grandes proyectos”, expuso Merino.
Prosiguió asegurando que “no se comprende que siendo Chile un país minero, los plazos de tramitación sean substancialmente superiores a los de otros países mineros como Canadá o Australia”.
Respecto de la evolución de la inversión minera -que además impulsa la de otras sectores como el energético-, explicó que “en la medida que realicemos bien esta tarea de agilizar la denominada permisología, con mayores grados de seguridad jurídica, estaremos transitando a paso raudo por la senda destinada a atraer y reencantar a los inversionistas y daremos un impulso relevante a la inversión minera”, concluyó.
millones sumaron los proyectos en el sector energía durante los primeros tres trimestres. US$4.230
millones totalizaron las iniciativas ingresadas a evaluación ambiental durante el periodo. US$4.257