Fuente: El Mercurio
Quebrada Blanca Fase 2 es la iniciativa más grande en evaluación de este sector. La industria esperaba que se resolviera durante el actual gobierno, lo que no ocurrirá.
Quebrada Blanca Fase 2, que con una inversión cercana a los US$ 5 mil millones es el proyecto más grande de la industria minera que está en evaluación, tendrá que seguir esperando por los permisos para ejecutarse. La iniciativa, propiedad de la canadiense Teck, es altamente esperada y la industria apostaba por su aprobación durante el actual gobierno, sin embargo, eso ya no ocurrirá.
Esto porque la minera solicitó una extensión de la suspensión del proceso de evaluación ambiental hasta el 30 de marzo, plazo requerido para responder una tercera tanda de preguntas realizadas por los distintos organismos con competencia ambiental de la Región de Tarapacá.
En operación, pero al final de su vida útil
Desde la industria esperaban que durante el primer trimestre se pudiera votar la iniciativa, considerando que si bien es un proyecto relevante, es una expansión de una mina que está en operación, aunque ya terminando su vida útil.
Añaden que con el cambio de gobierno, la evaluación tome más tiempo, considerando que debe existir un periodo de instalación de los nuevos jefes de servicio.
Un factor que no está en manos de la empresa y para lo que tampoco existe una fecha clara de término es el de la consulta indígena que se mantiene vigente con las comunidades cercanas al proyecto.
Consultados por esto, desde Teck recordaron que el proceso depende del Estado de Chile. En este caso, contempla ocho comunidades y ya se han cerrado acuerdos con dos agrupaciones. “Con las demás comunidades se está en distintas etapas de avance del proceso, incluyendo reuniones tripartitas”, señaló la firma.
Desde Teck comentaron que Fase 2 de Quebrada Blanca es un importante proyecto de crecimiento para su negocio de cobre. “Prolongaría la vida de la actual mina como una operación productora de concentrado de cobre a gran escala y produciría un equivalente a 300 mil toneladas de cobre metal anual durante los primeros cinco años a un bajo costo”, recalcaron.
Añadieron que “es un activo de larga vida que operará a través de varios ciclos de precios y generará un valor significativo durante muchos años”.